Sequía que sufre la región amazónica obliga a los buques a desembarcar carga en Itacoatiara.

El puerto fluvial de Manaos, en Brasil, enfrenta una grave crisis debido a una sequía histórica que ha disminuido drásticamente los niveles de agua en el río Amazonas y el río Negro, afectando la operación y navegabilidad de las embarcaciones de gran calado. Esta situación ha llevado a varias líneas navieras a suspender sus recaladas en el puerto, dificultando el transporte de mercancías y generando consecuencias para la economía de la región amazónica y su cadena de suministro.
Sequía histórica y bajos niveles del agua en el Amazonas
Los niveles de agua del río Amazonas han alcanzado mínimos históricos, lo que ha afectado significativamente las operaciones de navegación y logística en la región. Manaos, ubicada en la confluencia de los ríos Amazonas y Negro, es un punto clave para el transporte de carga en Brasil. Sin embargo, con el nivel del agua por debajo de lo normal, las embarcaciones de gran tamaño enfrentan restricciones para maniobrar y operar de manera segura en la zona. Esto no solo representa un riesgo para la seguridad de las operaciones portuarias, sino que también impacta directamente en el comercio de productos de consumo y exportación.
Impacto en la cadena de suministro de la Zona Franca de Manaos
Manaos es sede de la Zona Franca de Manaos, una zona industrial y comercial estratégica que concentra una gran parte de las exportaciones de Brasil. Las restricciones en el puerto han obligado a las líneas navieras a desviar sus rutas hacia otros puertos que ofrecen mejores condiciones de navegabilidad. Esta medida, aunque necesaria, ha incrementado los tiempos y costos de transporte, afectando los precios de las mercancías y dificultando la llegada de suministros esenciales a la región. Las empresas logísticas enfrentan una crisis de conectividad, que podría repercutir en la economía local si no se encuentran soluciones a corto plazo.
Medidas y perspectivas futuras
Para enfrentar esta emergencia, las autoridades brasileñas han comenzado a implementar acciones de adaptación en la infraestructura portuaria de Manaos y evaluar posibles soluciones temporales. Sin embargo, los expertos coinciden en que esta crisis podría intensificarse debido a los efectos del cambio climático, lo cual llevaría a considerar planes de adaptación y mitigación a largo plazo para preservar la conectividad de esta región vital para el comercio y la industria de Brasil.
La crisis actual en el puerto de Manaos destaca la vulnerabilidad de las infraestructuras fluviales ante fenómenos climáticos extremos y la necesidad de establecer medidas de adaptación que mitiguen el impacto de eventos de sequía en la región amazónica, una de las áreas más biodiversas y ambientalmente relevantes del mundo.
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