Si tiene una pequeña, mediana o gran empresa y necesita exportar o importar productos, es seguro que lo primero que busca es un operador logístico, que sea de confianza y rápido; sin embargo, para ser eficientes y agilizar los procesos debe tener en cuenta aspectos como: la distancia a recorrer, el peso del envío, las dimensiones, el volumen, la fecha de recepción, si tiene necesidades específicas (temperatura, fecha de caducidad, fragilidad, peligrosidad, etc.) y el tipo de transporte, así la mercancía llegará en estado óptimo y según los tiempos y planes previstos.
Tipos de transporte para un envío:
Transporte marítimo, si el tamaño de su envío es muy grande o si tiene mucha mercancía, puede optar por un FCL (Full Container Load), es decir, por un contenedor completo a disposición solo para tu carga. En cambio, si tiene poca carga, puede elegir un LCL (Less than Container Load), es decir, menos de un contenedor o una carga consolidada, donde comparte un contenedor con cargas de otras compañías.
Transporte aéreo, CLT tiene personal capacitado para el manejo y manipulación de cargas peligrosas, perecederos, animales vivos y cargas frágiles. Un aspecto importante es embalar bien su mercadería para evitar problemas durante el viaje.
Transporte terrestre, existe transporte rígido, contenedores, camiones, frigoríficos y más de acuerdo a las necesidades particulares de su envío. El transporte terrestre de carga de CLT está disponible a Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador y Chile e incluye control, seguridad y seguimiento eficaz.
Para los envíos, la recomendación es tomar un seguro internacional, para mayor tranquilidad durante el proceso, pues este sirve para proteger y asegurar la mercadería ante posibles riesgos derivados del transporte internacional o manipulación desde el domicilio de origen hasta el destino. Este servicio que se ofrece es "door to door" porque cubre toda la extensión del producto, desde su salida hasta su destino final.